Revisa paso a paso cómo crear la estrategia de e-commerce y poner en marcha una tienda online.

En el mundo de la venta digital tenemos dos opciones: crear un nuevo punto de venta  o realizar un e-commerce. Por un lado tendremos una experiencia de compra y en el otro extremo simplemente será un nuevo canal de pago. Para poder crear realmente un e-commerce tendremos que plantear una estrategia dónde todos los puntos estén conectados y el cliente en el centro.

Existen e-commerce de mil tipos: tiendas de ropa, tiendas de animales, de deportes, de vinos… En Internet hay una competencia increíble, por eso una buena estrategia de e-commerce nos puede permitir tener una ventaja competitiva respecto a la mayoría.

También hay e-commerce dónde el “Call to Action” no es propiamente la venta, sino que simplemente se busca un contacto (este caso se daría principalmente en empresas B2B).  Aquí únicamente se quiere iniciar una relación comercial, pero muchas veces la estructura web es la misma sólo que en vez de un carrito de la compra con precios tenemos una opción de contacto. En el siguiente link podemos ver una tienda de recambios para vehículos industriales que tendría este funcionamiento.

Una vez analizada la estrategia de e-commerce desde la perspectiva analítica mediante el sistema de los “huevitos”, toca ponerse manos a la obra y convertir la idea en realidad.  Teniendo claros todos los puntos que forman nuestra tienda debemos pasar horas en el ordenador para proyectar en pantalla la estrategia que hemos definido.

En muchos proyectos particulares no disponemos de los medios suficientes para subcontratar programadores que le den vida a nuestra tienda, por lo que tendremos que aventurarnos en la difícil tarea de plasmar nuestro e-commerce .

¿Qué pasos seguir? Presta atención:

Encontrar el dominio adecuado

Teniendo nuestra propuesta de valor bien definida tenemos que tomar la decisión más complicada de todas, ¿qué nombre le ponerle a la tienda?

Inicialmente se puede pensar en buscar un dominio que contenga keywords con un tráfico alto, pero aunque como estrategia a corto plazo puede ser efectivo, si quieres crear una marca y que ésta sea reconocida, no debes usar keywords para el dominio, sino buscar un nombre corto y que tenga cierto atractivo para nuestro usuario.

Un día me explicaron este concepto con la siguiente idea:

“Imagínate a Facebook con este dominio facebook-red-social.com”…

La imagen de la marca quedaría muy descuidada y no conseguiría el impacto deseado. Por ello, tienes que usar un dominio que tanto en redes sociales como en promociones quede en el usuario para que llegue al punto que capte tráfico directo.

Después de trabajar con diversos gestores de dominio recomiendo el de OVH, el cual tiene un panel muy sencillo en el cual cualquier usuario puede programar fácilmente su página web. En el caso de que el dominio que has buscado no esté disponible, puedes consultar en la plataforma SEDO si está a la venta, ya que en esta web puedes realizar compra y venta de dominios.

Cuando compres el dominio es una buena idea comprarlo para unos cuantos años, ya que Google reconocerá que quieres tener una relación larga y te beneficiará a nivel posicionamiento.

Hosting o almacenamiento de nuestro e-commerce

Una vez adquirido el dominio tendrás que comprar un “espacio web” o hosting, que no es más que el lugar donde alojarás tu sitio web. Para la selección de éste, es importante considerar el volumen de usuarios que esperas tener, ya que un host limitado hará que un exceso de conexiones sature la web y la haga innavegable. Además, considera que cuanto mejor sea el servidor mejor será el tiempo de carga, lo cual te beneficiará a nivel SEO.

El plan de hosting puedes contratarlo a la misma vez que compras un dominio, por lo que la plataforma ya te dejará todo preparado para la instalación de nuestra tienda.

Para un e-commerce medio no necesitas un gran servidor. Así, hay planes anuales por unos 200€  que incluyen el dominio. Si llegado el caso necesitas más espacio, puedes ampliar el servidor para mejorar la navegación del usuario.

Elección de nuestra tienda

Una vez está preparado tanto el dominio como el host, debes investigar diferentes modelos de tiendas. Uno de los más sencillos de utilizar es Prestashop, el cual permite configurar fácilmente toda la parte de usabilidad y estética de la web. En este tipo de plantillas, ya viene instalada toda la parte de formularios, contacto, carrito de  compra y demás aspectos necesarios para lanzar tu tienda online.

Con tal de elegir una buena plantilla, tendrás que pasar horas investigando la que mejor se acerque a tus necesidades. Para ello puedes mirar en páginas de plantillas y valorar diferentes opciones. En mi opinión, un gran aspecto a tener en cuenta es que la plantilla por defecto funcione con responsive. Esto te evitará muchos quebraderos de cabeza a la hora de optimizar para mobile.

Una vez elegida la plantilla, cómprala y descarga los archivos que posteriormente instalarás en tu hosting.

Instalación de la plantilla

Cuando tengas los archivos en tu ordenador tendrás que abrir la página donde tienes comprado el dominio y el hosting. Con eso, únicamente ve al apartado de módulos y selecciona qué tipo quieres instalar. Aquí te saldrá la opción de instalar diferentes formatos webs como Prestashop, Magento, Joomla o WordPress, entre otros.

En el caso del e-commerce podrías utilizar Prestashop e instalarlo; siguiendo los pasos de la pantalla tendrás todo preparado para instalar tu plantilla.

Una vez finalizada la instalación tendrás acceso al administrador de la web y será en este menú donde está la opción de cargar el tema que has comprado. Una vez instalado podrás modificar todo según tus necesidades. Lo más recomendable es empezar por cambiar todos los textos a tu idioma si por defecto está en inglés. Sino, únicamente tendrás que configurar poco a poco para ir añadiendo contenido como las categorías de producto, el blog o todo aquello que necesites.

Categorías, productos, formularios y demás

Para que el e-commerce vaya cogiendo forma debes ir configurando poco a poco cada aspecto de la web, traduciendo tu modelo elaborado en papel a la web. ¡Un dato! Es recomendable poner inicialmente en la web todo lo relacionado con la legalidad con tal de evitar problemas.

También es importante el uso de imágenes para darle atractivo a la web, ya que mejorará la experiencia del usuario en el site.

Una vez está todo listo, debes realizar un par de compras para ver que todo funciona correctamente y que la plantilla ya se ha encargado de preparar formulario y carrito de la compra.

Es recomendable segmentar muy bien los productos para que el usuario siempre encuentre contenido relevante en sus búsquedas en nuestra tienda.

Con tal de subir un producto, las plantillas por lo general nos lo ponen muy fácil:

• Selección del nombre
• Estructura de la URL
• Descripción corta
• Descripción larga
• Precio
• Categoría a la que pertenece
• Peso y medidas (para los gastos de envío)
• Categoría a la que pertenece el producto
• Imagen del producto
• Meta descripción
• Fabricante
• Transportista

Con esta información rellenada en las casillas de la plantilla, ya tendrás tu producto listo. Es importante usar las keywords del producto y del sector en la descripción con tal de lograr tráfico acorde a tu estrategia SEO.

Métodos de pago

Como métodos de pago cabe destacar; transferencia, tarjeta de crédito, Paypal y contra reembolso, aunque actualmente el principal medio es con tarjeta, siendo vital tener una buena pasarela de pago.

Para implementar la pasarela de pago tienes que estar constituido como empresa. Con el registro mercantil en la mano y las escrituras, podrás ir al banco a solicitar la instalación de esta.

Llevará unos días hacer las pruebas de que todo funciona correctamente, en muchos casos tendrás que instalar un plugin que te permita el uso de ésta.

Plugins y demás herramientas

Una vez tienes el e-commerce listo puedes instalar de diferentes complementos a la plantilla: existen mil tipos de plugins, cada uno con una función concreta.

En el caso de una tienda es recomendable instalar diferentes tipos, como por ejemplo algunos que permitan integrar la tienda en Amazon o eBay. También caben destacar plugins que hacen retargeting mandando emails a usuarios que abandonaron la cesta de la compra o otros que simplemente es un chat para dar apoyo al usuario.

Otros plugins también permiten hacer promociones por tiempo limitado, campañas o comparadores de precio entre otras cosas.

E-commerce: presente y futuro

El e-commerce sin duda alguna es el presente y futuro de las ventas, por lo que debemos conocerlo a fondo tanto desde la perspectiva estratégica como funcional.

Lo que está claro es que este nuevo modelo de venta crece a pasos agigantados y como profesionales del marketing tenemos que estar a la vanguardia de este mundo.

Rubén Mayol